Sanlúcar de Barrameda, el “Lugar Santo de la Tierra Firme entre Marismas” (que tal cosa significa su nombre), se encuentra en un entorno verdaderamente privilegiado, un paisaje, el de la desembocadura del Guadalquivir, el Parque de Doñana, el Golfo de Cádiz, en el que río, mar, flora y fauna se dan la mano para configurar un escenario privilegiado donde Historia, Cultura, Naturaleza conforman un todo integral, un verdadero tesoro, el de nuestro Patrimonio Cultural y Natural.
Los recursos del Patrimonio Cultural y Natural son generadores de riqueza y empleo y un factor de desarrollo económico sostenible, habiéndose convertido en una industria alternativa, en un motor económico, gracias, entre otros agentes, al turismo cultural y medioambiental. Hoy día el ámbito del Patrimonio es fruto de una larga evolución en su análisis e inteligencia, así como en los patrones de su experiencia, que van desde lo natural y medioambiental a lo monumental, pasando por el patrimonio arqueológico, industrial o paisajístico, a lo intangible, con una visión integral que incluye paisajes y elementos históricos, en la que conceptos como los de territorio e identidad (indisolublemente ligados en el marco del paisaje) son ejes de una nueva dimensión de los bienes patrimoniales.
Así, se despliegan en el horizonte dos objetivos, dos líneas de acción, Patrimonio Cultural y Natural y desarrollo económico entendido desde la sostenibilidad, coincidentes en muchos aspectos, pero que han tenido desarrollos no coordinados (y, por ende, interacciones no siempre satisfactorias): en gran medida, el turismo y la valorización del Patrimonio no han seguido siempre un mismo recorrido, por contar con objetivos distintos y por falta de coordinación; pese a este desencuentro entre turismo y Patrimonio Cultural y Natural, se ha desarrollado una nueva concepción del producto turístico-patrimonial, que debe estar al servicio de los ciudadanos, de los propios y de los visitantes.
Así, por ejemplo, el Turismo del Paisaje (que incluye al segmento deportivo animado por actividades lúdicas que permiten el disfrute del entorno natural, como el senderismo, por ejemplo, o el avistamiento de aves, que entra de lleno en los terrenos de la biología, de la mano del antedicho senderismo, por ejemplo, en buena medida) o el Turismo Arqueológico o Arqueoturismo (tan estrechamente ligado a lo anterior) son hoy por hoy productos de mercado que pueden contar con una especial -y positiva- incidencia en geografías de interior, por ejemplo, con una notable disponibilidad de recursos de base (cosa distinta será el estado del desarrollo de dichos recursos de base…).
Es de señalar que la gestión de estos recursos es siempre susceptible de mejora: la convivencia entre la protección y conservación del Patrimonio (por ejemplo, pero no sólo, el Arqueológico) deberán, de la mano conjunta de las iniciativas pública y privada, ofrecer nuevas respuestas a las inquietudes de la Sociedad actual.
En este caso se trata de considerar el Patrimonio Cultural y Natural de Sanlúcar de Barrameda como una fortaleza, como una oportunidad, como una realidad global, que trasciende de lo puntual y que puede ofrecer respuestas de manera armónica con los municipios del entorno y con la gestión ejecutada asimismo por y desde entidades administrativas superiores, especialmente dado que nos encontramos en un marco con tan especiales características medioambientales, un medio geográfico que da cita no sólo a elementos patrimoniales “humanos” (históricos, culturales), múltiples, sino a un paisaje, rico y polimórfico, articulado y poliédrico, que aúna verdaderos tesoros patrimoniales en lo cultural y lo natural.
Hay espacios, hay destinos que cuentan con una ventaja considerable respecto a otros, precisamente porque son “marcas” de calidad, de excelencia, en sí mismos: creemos firmemente que la provincia de Cádiz y la desembocadura del Guadalquivir son hoy por hoy, plenamente, una “marca de calidad” en sí mismas y un referente sumamente atractivo, y que como tal, puede (y debe) armonizarse el trabajo sobre el Patrimonio Cultural y Natural y la oferta de turismo patrimonial de manera integrada y armónica. Sanlúcar de Barrameda, de este modo, ocupa un lugar preferente en este contexto: Sanlúcar es un destino ideal y una marca de calidad en sí misma, un destino que el cine ha hecho suyo en repetidas ocasiones, y que aparece como un espacio de referencia para quienes buscan Belleza, Cultura y Naturaleza…
Monumentos, Paisaje, Río, Doñana, Manzanilla, vinos, Gastronomía, Arte, Flamenco, Historia, Cultura, Música, Marismas, Fauna, Bodegas, Langostino, Cultivos de Arenas Finas…, son claves, y no son todas, de nuestro Paisaje Cultural y Natural, del escenario privilegiado en el que Sanlúcar de Barrameda reina, desde sus alturas y riberas, sobre la desembocadura del Guadalquivir…
COMO BOTÓN DE MUESTRA
Paisaje Cultural
- Reloj Ecuatorial «Legua Cero»
- Nuestra Señora de Guía
- Nao Victoria
- Azulejos Conmemorativos de la Primera Vuelta al Mundo
- Iglesia de la Trinidad
- Convento Madre de Dios
- Convento Regina Coeli
- Iglesia de San Jorge
- Iglesia de Santo Domingo
- Parroquia de San Nicolás
- Iglesia de San Francisco
- Castillo de Santiago
- Retablo pétreo de la Primera Vuelta al Mundo
- Parroquia Mayor de Nuestra Señora de La O
- Palacio de los Guzmanes
- Pavimento del siglo XVI
- Exposición de Arte Sacro. Convento de Carmelitas Descalzas
- Convento de Capuchinos
- Convento de La Merced
- Basílica Menor Ntra.Sra de La Caridad